Díos sólo quiere nuestro bien y nuestra felicidad. Y nos proporciona los camino de la felicidad.
Los males que nos llegan son el resultado de acciones equivocadas que vivimos, y de falta de experiencia.
Convierte los ambientes en que vives en sementeras de amor y perdón , para cosechar mañana los frutos de la paz y la felicidad
Hace tiempo que vives con el propósito de cambiar tu vida, de mejorar tus actos, de terminar definitivamente con tus deficiencias. ¡entonces comienza ya! No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy... Está claro que todo no lo solucionarás de la noche a la mañana. ¡Pero, comienza ya! Si caes de nuevo, no te desanimes: ¡Vuelve a empezar cuántas veces sea necesario!