Arrójalos de ti, perdonando y olvidando el mal que te hicieron con palabras, obras y denigraciones, calumnias e injusticias.
¡Olvida!
Únicamente tú saldrás ganando con perdón, porque habrás liberado tu corazón del peso de la amargura y el odio.
Sé inteligente: perdona y olvida y serás feliz.
Hace tiempo que vives con el propósito de cambiar tu vida, de mejorar tus actos, de terminar definitivamente con tus deficiencias. ¡entonces comienza ya! No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy... Está claro que todo no lo solucionarás de la noche a la mañana. ¡Pero, comienza ya! Si caes de nuevo, no te desanimes: ¡Vuelve a empezar cuántas veces sea necesario!