El padre no hace eso con nadie. A las aves las viste de pluma multicolores, embellece y perfuma las flores, alimenta a los insectos, para que no muera de hambre siquiera un sólo gusanito.
Convencete de que no caerá ni un solo cabello de tu cabeza, sin que él lo permita.
¡Confía en el Padre!
¡Él jamás te abandona!
Hace tiempo que vives con el propósito de cambiar tu vida, de mejorar tus actos, de terminar definitivamente con tus deficiencias. ¡entonces comienza ya! No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy... Está claro que todo no lo solucionarás de la noche a la mañana. ¡Pero, comienza ya! Si caes de nuevo, no te desanimes: ¡Vuelve a empezar cuántas veces sea necesario!