No te quedes en los niveles vegetal o animal, viviendo de instintos.
Desarrolla la parte humana de tu ser.
Esfuérzate por conocer la verdad sobre los orígenes y tus metas, empleado el pensamiento en un conocimiento más hondo de ti mismo.
Por escasa cultura que tengas, tienes una inteligencia capaz de pensar y razonar.
Hace tiempo que vives con el propósito de cambiar tu vida, de mejorar tus actos, de terminar definitivamente con tus deficiencias. ¡entonces comienza ya! No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy... Está claro que todo no lo solucionarás de la noche a la mañana. ¡Pero, comienza ya! Si caes de nuevo, no te desanimes: ¡Vuelve a empezar cuántas veces sea necesario!